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Ficción Científica
Ficción Científica

Ecos

Me gusta Víctor Conde, y eso que no he leído mucho de él, pero es algo que tengo que solucionar pronto. Leí el primer libro de Conde, sin saber que estaba leyendo, era Piscis de Zhintra, y me pareció bien, un poco juvenil, pero interesante. No me volví a fijar en este autor hasta años después con sus “Crónicas del Multiverso”, y ahí me di cuenta de que este hombre tenía algo especial, este libro me gustó muchísimo. Además escribe space opera como nadie. Por eso cuando Sportula empezó a anunciar este libro, yo me frotaba las manos, otra novela de este hombre, ¡¡y un space opera!!

Y una vez leído, os puedo decir que no defrauda nada, me ha encantado.

El libro nos cuenta la historia de cuatro niños, creados por ingeniería genética, y educados en un entorno muy controlado por una inteligencia artificial hasta que la humanidad los necesite, mientras, sin que ellas tengan noticia de ello, se desarrolla una guerra contra un invasor alienígena, una guerra que los humanos están perdiendo. Por eso parece que esos niños son la última esperanza.

Una novela que aparentemente es fácil, con giros de guión que me han gustado mucho, donde los buenos resultan no ser tan buenos ni los malos tan malos. Una historia compleja en la que te vas metiendo poco a poco.

Los personajes muy bien dibujados, aunque se centran en los niños, el ordenador que los cuida y la robot que se hace cargo de ellos, los demás… pues puro escenario, pero es que los demás no tienen mucha presencia en la novela.

Solo tengo una queja, reconozco, pero me resulta muy difícil de entender como unos seres como los Exth pueden alcanzar la inteligencia, no lo veo, creo que falta una explicación.

Quitando ese aspecto, que es muy fácil de quitar, creo que es una novela que hay que leer.

El final me ha gustado muchísimo, el mejor final de una novela que he leído.



07/07/2015