Twitter Facebook
Entrar o Registrarse
desc

Si no tienes cuenta Regístrate.

Mobi Epub Pdf  

Madre solo hay una

Eximeno, Santiago

—Cuéntamelo otra vez —te apremia Jesús.

     Carraspeas, le miras. Se le ve tan hermoso, tan joven. Y tú te sientes tan vieja, tan cansada. No quieres contárselo, pero aún así sabes que lo harás. Ha pasado el tiempo de las discusiones.

—Tú sabes lo que ocurrió, Jesús. Tras años de crisis sociales y económicas, tras años de penurias, las naciones del mundo dejaron atrás treguas impostadas y se embarcaron en la Gran Guerra. Veinte largos años dura ya. Nos ha arrebatado nuestra felicidad, nuestra vida. Nuestros hijos.

—Pero yo estoy aquí —dice Jesús.

    No va a permitir que pares. Quiere oírlo de nuevo, desde el principio hasta el final. Quiere que te sientas culpable. Vosotros cambiáis, pero estas conversaciones, muy a tu pesar, perviven.

    —Nuestro dinero y nuestra posición, Jesús. Quieres que te lo repita y lo hago. Estás aquí gracias a nuestro dinero y nuestra posición. Nuestra nación era poderosa antes de la Gran Guerra, nuestros conocimientos eran vastos. Cuando todos los jóvenes del país fueron reclamados para alistarse en el ejército se nos ofreció una locura, una aberración. Una esperanza.

    —La clonación.

    Ah, llegamos a la última parte, la más difícil. Cómo obviar una de las virtudes de tu hijo, la que más apreciabas: su terquedad.

    —Sí. La clonación —te cuesta pronunciar esas palabras—. Algunos, muy pocos, clonamos a nuestros hijos. No era un proceso sencillo, no era un proceso barato. Lo hicimos por amor. Sin condiciones. Sabíamos que íbamos contra la naturaleza humana, pero en aquel momento creímos que era nuestra única opción.

    —Lo entiendo —dice Jesús, y en sus ojos puedes ver que no es cierto, que nunca lo entenderá—. Pero sabes que no puedo dejar de pensar en ello. Yo amo a mi patria. ¿Qué hubiera sucedido si yo hubiera querido ir al frente como voluntario, si no hubiera permitido que mandarais a mi clon en mi lugar?

    Y es entonces cuando sonríes, te levantas y le abrazas.

    —No lo sé. No lo sé —dices, y tratas con todas tus fuerzas de no volver a llorar.

 

 

Santiago Eximeno (Madrid, 1973) ha publicado novelas como Condenados (Saco de Huesos, 2011) y Asura, libros de relatos como Obituario Privado (23 Escalones, 2010), y numerosos relatos en diferentes antologías y revistas, así como infinidad de microrrelatos que también ha recogido en volúmenes como Gas Mask (Ediciones del Cruciforme, 2012). Mantiene una Web con información actualizada de su obra: http://www.eximeno.com